martes, 21 de octubre de 2008

La Balanza de mi Tío Pepe


A lo largo de nuestras vidas, todos tenemos personas a nuestro alrededor que indeleblemente marcan nuestra personalidad y comportamiento: más allá de la obvia influencia de nuestros padres; en mi particular caso debo mencionar a alguien que, sin ser psicólogo, político, poeta, periodista o cualquiera otro de esos oficios que se adjudican "la verdad" como patrimonio, posee una sabiduría "silvestre" y natural adquirida en muchos años de leer "Selecciones" y otros tantos trabajando muchísimas madrugadas en el aeropuerto internacional de Panamá.... mi tío Pepe.

"Pepín" como se autodenomina Pedro Caicedo Navas es un hombre fuerte de manos cansadas y dedos gordos como chorizos, ojos de lince, y personalidad de"tabernero"; fanático del pesca'o frito e incansable consumidor de "sopa", de lo que sea pero que sea "sopa", es el vivo ejemplo de los hombres que triunfaron y cosechan el fruto de su esfuerzo viviendo una vida con no más que lo que necesitan... lo necesario!!!.. hoy compran el arroz que se comen hoy, y hoy se beben el guaro de hoy.... y el दे mañana, Así es Pepín. Pero eso no le quita que también es un sabio...

En un día lluvioso como los de siempre en Panamá, mi tío extendió y abrió su mano cansada con dedos gordos frente a mí, y la balanceaba con pausa mientras me decía que "LA VIDA ES COMO UNA BALANZA", decía que lo que hacemos mal la vida nos lo cobra y establece un equilibrio; "...no Dios, la vida!! porque Dios es bueno, es la vida la que nos cobra las "cagadas" que hacemos", me decía.

Estoy seguro que mi tío no practicaba el budismo, ni ninguna de esas religiones orientales, ni es Hare Krishna ni sabe de metafísica o sánscrito; más allá de que a veces parece hablar en latín cuando se pone en "something" con el "nueve letras y el jugo de vaca", pero en esa simple frase se dibuja una verdad universal, una filosofía de vida... EL KARMA: ley cósmica de retribución o de causa y efecto; o como diría el cristianismo: "con la vara que midas serás medido y una cuarta más", o como dirían los Hare Krishna: "Es una ley que ajusta sabia e inteligentemente el efecto a su causa"; o como diría mi tío: "ahora, resuelve tu arroz con mango".

Llamalo como quieras; pero no podemos pasar la vida o parte de ella dañando a otros; ignorando el sufrimiento ajeno, infligiendo dolor o tristezas sin esperar que alguna vez nos pidan cuentas; y no en infierno o en el purgatorio o con San Pedro a las puertas del cielo, no!!! aquí y ahora limpiaremos nuestra caca, créanlo ya lo he visto, nadie se escapa.

Por ello ponte en paz contigo y con tu víctima, resuelve de una vez y por todas todo aquello en que tu conciencia te diga que fuiste un miserable, porque no hay mejor juez y jurado que nuestra propia conciencia; se lo debes a quien jodiste con tu egoísmo, avaricia o maldad. Que no pase como es común, que cuando estamos viejos y cagalitrosos, que apenas podemos pujar, es cuando queremos reunir en torno a la cama a todos y pedirles perdón.... mierda!!! y antes de que eso suceda.. pelamos e bollo!!!.

Definiciones del Karma: "Aquél que realiza acciones por las que recibirá reacciones", "el que a hierro mata, a hierro muere", "el que siembra rayos, cosecha tempestades", "ojo por ojo diente por diente". Carajo, más claro no canta un gallo; ya sé que no todos tienen la fortuna de tener, como yo, un Tío Pepe para que les abra los ojos ante estos misterios de la vida, pero por lo pronto ya están advertidos sobre éste. Yo le diré a Pepín que le agradecen su consejo.

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